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Un video que circula en redes sociales ha generado indignación entre los habitantes del sector Parques de Bolívar, en Cúcuta. En las imágenes, presuntamente grabadas por uno de los reclusos del CAI de Trigal del Norte, se observan personas privadas de la libertad bailando con música a alto volumen, luces azules y el uso evidente de teléfonos celulares.
Aunque las autoridades aseguran que el video fue manipulado digitalmente, para los vecinos no es un hecho aislado. Habitantes del condominio Torres de Bolívar afirman que el desorden dentro del CAI es recurrente. «Se escuchan gritos, música y groserías a cualquier hora. No es la primera vez», aseguró una residente.
Otro testimonio da cuenta de presuntas llamadas extorsivas originadas desde dentro del mismo CAI, situación que ha incrementado la preocupación en la comunidad. “En el video se evidencia que tienen luces y celulares. Incluso hay vecinos que aseguran haber recibido llamadas extorsivas de esos individuos”, señaló una mujer que pidió no revelar su identidad.
Además, comerciantes del sector recordaron un episodio violento ocurrido el año pasado en el mismo lugar, cuando dos reclusos asesinaron a otro con una hojilla, presuntamente por rivalidades entre bandas criminales.
A estas preocupaciones se suma el recuerdo de un atentado ocurrido en julio pasado cerca de las Torres de Bolívar, que las autoridades atribuyeron a una posible retaliación del ELN. Aunque no hubo víctimas fatales, los daños materiales y el temor persistente entre los residentes han marcado a la comunidad.
Frente al escándalo desatado por el video, la Policía Metropolitana de Cúcuta informó que el pasado sábado 20 de septiembre realizaron una requisa en el CAI, en la que decomisaron cuatro celulares, cargadores y papeletas con sustancias alucinógenas.
No obstante, aseguraron que el video fue manipulado digitalmente. «Se analizaron los elementos del video y se identificaron filtros, ediciones de sonido y montaje de música, lo que evidencia que se buscaba simular un ambiente de fiesta», indicó la institución en un comunicado.
La Policía también señaló que estos elementos podrían haber ingresado al lugar con ayuda de familiares durante las visitas, y no descartaron la posible complicidad de algunos funcionarios, por lo que actualmente se adelantan labores de contrainteligencia.
Finalmente, la institución reiteró que se realizan inspecciones periódicas en las estaciones de policía para prevenir este tipo de situaciones y se llevan a cabo brigadas de salud en coordinación con la Alcaldía para atender a los reclusos.
Ante los hechos, los vecinos del sector exigen un mayor control sobre el funcionamiento del CAI y las condiciones de reclusión. Piden acciones concretas para evitar que se repitan situaciones que atenten contra la seguridad y tranquilidad del vecindario.
“Es inaudito que desde un CAI, que se supone debe representar el orden, se estén generando hechos que causan tanta inseguridad”, puntualizó un líder comunitario.
