Una fuerte explosión registrada en una fábrica de fuegos artificiales ubicada en la Zona Industrial del municipio San Francisco, en Maracaibo, estado Zulia, dejó al menos 23 personas heridas y provocó daños en 482 viviendas, según informó el gobernador de la entidad, Luis Caldera. El siniestro ocurrió este jueves a las 9:37 de la mañana, hora local, y generó una onda expansiva que se sintió a más de seis kilómetros a la redonda, causando pánico entre los habitantes y destrozos considerables en infraestructuras residenciales y comerciales.
Del total de viviendas afectadas, unas 30 casas construidas con materiales precarios quedaron totalmente destruidas, mientras otras 60, de concreto, sufrieron daños parciales, con ventanas rotas, paredes cuarteadas y techos colapsados. Entre los testimonios de los damnificados, destaca el de Antonio Delgado, un residente de 65 años que perdió por completo su vivienda. «Ahí no me quedó nada, nada, no me queda nada… eso está todo destrozado», declaró con visible conmoción. Su esposa y su suegra estaban dentro del inmueble al momento de la explosión, pero ambas lograron salir ilesas.
Equipos de bomberos de Maracaibo y San Francisco acudieron al lugar para combatir el incendio originado por la explosión, mientras se desplegaban cuerpos de seguridad y organismos de inteligencia, por instrucciones del ministro del Interior y Justicia, Diosdado Cabello, con el fin de investigar las causas del estallido y garantizar la atención a las familias afectadas. Las autoridades del Sistema Nacional de Gestión del Riesgo aseguraron que el incendio ya ha sido controlado y que la ciudad se encuentra en calma.
Aunque aún no se ha determinado el origen exacto de la explosión, el caso ha generado preocupación en la población por la cercanía de industrias peligrosas a zonas residenciales y la aparente falta de controles efectivos. Las autoridades indicaron que se iniciarán investigaciones para esclarecer lo ocurrido y establecer responsabilidades, al tiempo que evalúan medidas de apoyo para los damnificados, quienes ahora enfrentan la pérdida total o parcial de sus hogares en medio de un contexto económico ya complejo.